Vuelta a la realidad

Depués de cinco intensos meses preparando la boda y quince excitantes días de tour por África, toca volver a la normalidad y aunque, después de este fantástico periodo, esto parece que tenga connotaciones negativas, es todo lo contrario.

El pasado 3 de mayo fue uno de los mejores días de mi vida, todo el mundo me había dicho que no me iba a enterar de nada, que todo iba a pasar muy rápido... y claro, yo no le veía la gracias, pues tanto meses preparándolo todo para que luego no te lo pases bien, creo que esto era lo que más me preocupaba... Pero en contra de lo que me decía la gente, ME LO PASÉ FENOMENAL Y ME ENTERÉ ABSOLUTAMENTE DE TODO, bueno de todo, todo, no... luego haciendo repaso marujil a los vestidos del personal me he dado cuenta de que de todos no me acuerdo... pero bueno, eso es un mal menor, porque para eso están las fotos!!!!! Así que nada, todo fantástico: el coro baturro hizo que la misa fuera bonita y diferente; lo fotógrafo simpatiquísimos, no pudieron hacer más fotos; los invitados guapísimos y para culminar la sesión EL BAILE DEL PEZ, desde luego, la boda no habría sido la misma sin el baile del pez ;)

Y después del desmadre, llegó la calma, al día siguiente partimos hacia África para hacer un recorrido por las Cataratas Victoria, los safaris de Namibia y Bostwana y las playas de Isla Mauricio. Parece ajetreado, ¿verdad? Pues para nada. Hemos disfrutado de la naturaleza y los animales y hemos comido como nunca!!!! (al menos yo y eso es rarísimo) He vuelto relajada, feliz y con las pilas cargadas para empezar con el nuevo reto de la casa.

Y entre naturaleza y animales, me ha dado tiempo a leerme dos libros El juego del Ángel y Crepúsculo.